No ves que me haces daño yo te he dado todo… ¡todo!
para que tengas una vida feliz.
Sin darte preocupaciones, solo para que vivieras tranquilamente.
Pero me traicionas me dañas con líquidos, humos y algunas
otras cosas que me hacen perder la conciencia, despierte una mañana y no tenga
idea de donde estoy.
Tanto vi por ti que me perdiste el respeto… tomaste las
malas influencias y quisiste integrarte a un grupo que tedio miedo decir que
“no”.
Ahora tu estas aquí postrado en esta cama capaz de moverte
para terminar muriendo por lo que tu al
final quisiste.
Me destruiste a mí que soy “tu cuerpo” ¡no! “era tu cuerpo” ya que te pago con la
misma moneda tu mataste lo mejores años de mi vida.
Ahora te mato para destruir la tuya ya que no quiero seguir viviendo.
Una muerte muy silenciosa… te causare.
Ojo por ojo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario